A veces, al principio, parece que todo está lúgubre y lluvioso y que nunca veremos la luz al final del túnel. Renunciamos a nuestros sueños y nos retiramos a nuestro rincón de soledad, lo que nos da una sensación imaginaria de seguridad.
Pero, justo cuando ya hemos tenido suficiente y cuando pensamos que ya se acabó, aparece una luz en algún lugar a lo lejos y nos da esperanza. Es el momento que lo cambia todo y aquel a partir del cual la vida ya no es la misma.
La historia que estás a punto de leer es el mejor testimonio de ello: trata sobre una pequeña vida que estaba en la oscuridad y finalmente perdió la esperanza de la luz. Pero, en ese mismo momento, apareció el resplandor más fuerte en forma de almas buenas que nunca más permitieron que esa oscuridad prevaleciera.
Cuando salieron de su compañía, estas personas notaron que algo pequeño temblaba solo en la esquina del edificio. Después de acercarse, se dieron cuenta de que era un lindo cachorrito . Estaba congelada por un viento frío y su pelaje estaba todo mojado por una fuerte lluvia.
Sus corazones estaban rotos ante esta vista, por lo que inmediatamente decidieron ayudarla. Tomó algún tiempo ganarse su confianza, pero finalmente lo lograron y ella los siguió hasta el almacén de la empresa.
Allí le dieron de comer para que recuperara sus energías. Cuando ella satisfizo su hambre, uno de los rescatistas la tomó en brazos y la llevó al auto. Mientras conducían hacia la clínica veterinaria, ella todavía tenía miedo, pero pudieron ver un rayo de esperanza en sus ojos .
Tan pronto como llegaron, una enfermera de buen corazón la acogió. La consoló y animó para que el examen transcurriera lo mejor posible.
Cuando finalmente llegó el médico, inmediatamente notó pequeñas heridas debajo de su piel húmeda . Sin embargo, no pudo dar un diagnóstico certero porque su cabello estaba sucio y espeso.
Entonces, primero la bañó a fondo y luego le secó el cabello. Todo este tiempo ella fue una buena chica y no causó problemas, por lo que todo terminó muy rápido. Afortunadamente, el médico no encontró ninguna herida grave salvo algunas más pequeñas.
Inmediatamente le dio la medicina necesaria y después de solo unos minutos, esta valiente niña ya se sentía mucho mejor.
Como el cachorro no tenía ningún problema de salud grave, no era necesario que permaneciera más en el hospital. La veterinaria solo les dio a sus rescatistas los consejos necesarios sobre cómo cuidarla y la dieta adecuada que la ayudaría a sentirse mejor y recuperarse pronto.
Antes de lo esperado, esta chica se dirigía a su casa y, en el camino hacia allí, no se quitó la sonrisa de su rostro. Sus salvadores se alegraron muchísimo al verla así ya que su felicidad era un verdadero bálsamo para sus almas.
Después de pasar ocho días descansando y recuperándose en casa, sus salvadores finalmente la sacaron a caminar. Ciertamente no podrían haber imaginado cuánta felicidad le traería.
No dejaba de mover la cola y el sol tenía un brillo especial en sus ojos. Ningún transeúnte podía resistirse a su contagiosa energía positiva, por lo que todos se detenían para codiciarla y acariciarla.
Todo esto alimentó su alma y la empujó imparablemente hacia la recuperación total, tanto física como emocional. Después de dos semanas, eso finalmente sucedió, y esta cachorrita ya no tenía ni una sola herida en su cuerpo ni en su alma .
Estaba a sólo un momento feliz más de las puertas del paraíso, y probablemente no podría haber soñado que llegaría tan pronto.
A través de todos estos momentos felices pasados con su cachorro, y también de los difíciles, sus salvadores se unieron profundamente a ella. Se acostumbraron tanto a su sonrisa y a esa energía positiva que ya no podían imaginar la vida sin ella.
Después de un mes de quedarse con ellos, decidieron cumplir su mayor deseo: convertirse en un miembro de pleno derecho de su familia . Es difícil decir quién fue más feliz, pero lo cierto es que sus vidas nunca volvieron a ser las mismas desde ese momento.
Este lindo cachorrito hizo que cada día fuera más hermoso y digno de ser vivido por su apariencia. A cambio, le proporcionaron todo lo que necesitaba. Tenía un techo sobre su cabeza y toda la comida que quería.
Sin embargo, lo más importante es que recibió el amor y la esperanza que le faltaba en esos momentos más difíciles de su vida. Es lo que la salvó de la oscuridad y le dio la fuerza para alcanzar los cielos.
Por suerte, los cielos brillan para siempre.